domingo, 6 de diciembre de 2015

Pedir permiso

Los debates políticos en TV cada vez me aburren mas pero ayer, haciendo zapping, pude escuchar a nuestro Presidente de Gobierno decir que para manifestarse había que "pedir permiso". La frase venía a cuento de una pregunta sobre la conocida como "Ley Mordaza" y la frase venía a decir (hablo de memoria) que en España había libertad de manifestación pero que para ello había que cumplir con las leyes; por ejemplo, "había que pedir permiso".

Al parecer, Rajoy no sabe que desde 1978 en España ya no hay que pedir permiso para manifestarse.
Es verdad que la Ley Orgánica 9/1983 reguladora del derecho de reunión dice que "La celebración de reuniones en lugares de tránsito público y de manifestaciones deberá ser comunicada por escrito a la autoridad gubernativa", pero "comunicar" no es lo mismo que "pedir permiso". Pedir permiso implica reconocer a la autoridad gubernativa la potestad de prohibir o permitir la manifestación. Comunicar, en cambio, es un mero trámite administrativo por el que se informa a la autoridad gubernativa de que la manifestación se va a celebrar, para que pueda tomar las medidas necesarias, por ejemplo, para garantizar el ejercicio pacifico del derecho a manifestarse.
Bien es verdad que la propia Ley 9/1983 concede a la autoridad gubernativa la potestad de modificar o incluso suspender la manifestación cuando concurren circunstancias especiales (que la ley describe), pero esta potestad no es  ilimitada, sino que que está sujeta al posible recurso que los organizadores puedan interponer ante el juez, que debe responder con urgencia y puede dar la razón a los organizadores y revocar la decisión del gobierno, algo que en España ha sucedido ya en mas de una ocasión.
Puede que al "ciudadano de pie" (que, como todo el mundo sabe, es una categoría filosófica cuyas principales características son la ignorancia y la indiferencia) que tanto le gusta a Rajoy, toda la discusión precedente le traiga sin cuidado y considere que a fin de cuentas da lo mismo. Pero a un ciudadano consciente de sus derechos no debería darle lo mismo. 
A mí al menos, me parece escandaloso que todo un Presidente de Gobierno (y candidato a la Presidencia por cuatro años mas) se permita el lujo de decir en un programa de TV de máxima audiencia que en España hay que pedir permiso para manifestarse. Y que, al día siguiente, ninguno de los otros candidatos diga nada me parece mas escandaloso todavía (he mirado posibles reacciones en Internet y solo he encontrado un par de tuits al respecto por parte de gente poco conocida).
Si este es el resultado de 40 años de democracia tras una transición "modélica", apañados vamos.

sábado, 4 de abril de 2015

Paisaje después de la batalla ¿Pueden 15 (+5) ser menos que 11?

Las elecciones andaluzas han dibujado un nuevo Parlamento claramente escorado a la izquierda respecto de los resultados de 2012. La derecha, representada por el PP y Ciudadanos ha obtenido 42 escaños, 8 menos que los obtenidos por el PP en solitario en 2012. El PSOE, cuyo discurso se reclama de izquierdas, ha repetido con 47 escaños, mientras que los partidos a su izquierda han obtenido 20 diputados en total (15 de Podemos por 5 de IU), ocho mas que los 11 obtenidos por IU en solitario en 2012.

Sin embargo, el gobierno que se espera tras las elecciones no es un gobierno escorado a la izquierda con respecto al gobierno anterior, resultado de una alianza entre PSOE e IU, sino un gobierno del PSOE en solitario, es decir un gobierno escorado hacia el centro, en el que la izquierda transformadora pierde influencia.

Para algunos esto solo demuestra que la situación anterior era una situación atípica, producto de un pacto "in extremis" consecuencia de la mayoría relativa del PP, que obligaba al PSOE a un pacto con IU para mantenerse en el poder. Sin embargo, un breve vistazo a la nueva composición del Parlamento basta para convencernos de que el PSOE necesita también ahora de algún pacto para mantenerse en el poder, es decir para conseguir la investidura y gobernar en minoría, como parece ser su objetivo.

De modo que, al menos en principio, los grupos políticos a su izquierda - Podemos en especial - tienen todavía margen para imponer una negociación y un gobierno al menos tan a la izquierda como el anterior. O, en su defecto, a forzar al PSOE a un pacto con su derecha, lo que dañaría su pretendida imagen de partido de izquierdas o, en último extremo, forzar unas nuevas elecciones.

Llama por tanto la atención la polémica que parece haberse instalado en Podemos acerca de su apoyo o no a la investidura de Susana Díaz, como si apoyar o no un gobierno en solitario del PSOE fuese la única posibilidad. Una posibilidad que, eso sí, una vez alcanzada no tendría vuelta atrás, pues sería impensable una moción de censura para la que tendrían que ponerse de acuerdo formaciones a la izquierda y a la derecha del PSOE.

En 2012 IU apoyó la investidura de Griñán a cambio de un pacto de gobierno que contenía medidas inequívocamente de izquierdas y de dos consejerías desde las que impulsar políticas propias de vivienda, de infraestructuras, de movilidad y de turismo. ¿Deben los 15 diputados de Podemos pedir menos a cambio de su apoyo? Parece absurdo.

Y si la estrategia de Podemos pasa por no apoyar a Susana Díaz, obligándola a un acuerdo con la derecha o a convocar nuevas elecciones ¿A que vienen tantas dudas y tanto marear la perdiz al respecto?.

¿Son acaso 15 menos que 11?